Desde tiempos remotos, la índica y sativa han sido las especies más populares de cannabis debido a las diferencias en sus efecto. Cuando se es consumidor de marihuana, ya sea psicoactiva o no, es importante saber cómo nos va a afectar para que no nos arruine el día.
Esto se hace más patente en los tipos de marihuana que tienen THC. Seguramente te hayas dado cuenta de que, por una parte, si pruebas determinadas marihuanas e intentas dormir te será imposible, y por otra, si pruebas de otros tipos y te vas al concierto más animado que se te pueda ocurrir, serías capaz de quedarte dormido al lado del bafle.
En este artículo vamos a ver la clasificación tan famosa de marihuanas entre índica y sativa, sus diferencias, la relación que esto tiene con cómo te sienta y que dice la ciencia de todo esto. ¡Vamos allá!
Índice
Diferencias entre índica y sativa
Ya sabemos entonces que entre un tipo de marihuana y otro puede haber diferencias enormes en forma, color y efecto. En esta primera parte del artículo vamos a hablar un poco de las definiciones que se vienen usando desde hace mucho tiempo en el imaginario común. De esta forma vamos a caracterizar lo que se entiende por índica y lo que se entiende por sativa.
Aunque definamos estos grupos y después maticemos nuestra opinión, veremos cuánto de cierto hay en esto. No olvides que en esta otra entrada ya hablamos sobre cuántas especies de plantas componen la marihuana y que clasificación ha sido propuesta por la ciencia a la luz de la evidencia de la que se dispone.
Una vez aclarados estos puntos, vamos al meollo del asunto: ¿Qué significa que una marihuana sea índica o sativa?
Marihuana Índica: un mar de tranquilidad.
Desde el punto de vista del consumidor, la variedad índica es aquella con una presencia algo menor de THC y mayor de otros cannabinoides con efectos sedantes entre otros, como el CBD. Su origen radica en la zona de Asia central y el subcontinente Indio, en lo que hoy en día son Pakistan, Nepal, India, Afganistán etc.
Respecto a la forma de la planta en sí, son más pequeñas y robustas que las sativa, con unos cogollos densos y olorosos. La floración es más corta que en el caso de la sativa. Todas estas diferencias de forma y tiempos son explicables por las diferencias climatológicas de los orígenes de cada una.
Como habrás imaginado ya, en vista del párrafo anterior, no es solo que la diferencia entre índica y sativa sea en su composición (y, por tanto, en cómo te afecta), sino que también existen diferencias morfológicas que serían observables a simple vista (al menos según el imaginario popular).
Marihuana Sativa: un poco de acción
Si una marihuana que sea índica destaca por la tranquilidad e incluso la somnolencia, la sativa es signo de creatividad, hilaridad y acción. Esto se debe a que tiene una mayor presencia de THC y menos CBD. Originaria de zonas tropicales como Tailandia, el sur de la India o algunas zonas de América como Jamaica o México, son plantas que tienen un mayor tamaño y periodo de floración que la índica. Sus cogollos son menos densos pero más grandes, y normalmente no son tan aromáticos.
Si quieres saber un poco más sobre esta clasificación antes de abordar este tema desde otras perspectivas, puedes consultar este artículo de prensa que habla sobre ello.
Índica vs sativa. ¿Qué dicen los datos?
Una vez que hemos caracterizado un poco a que nos referimos cuando hablamos de cannabis indica y sativa, vamos a ver desde distintas perspectivas si estas diferencias se corresponden con los datos.
Lo que los consumidores dicen
Vamos a empezar con datos acerca del consumo de indica y sativa y los testimonios de las personas. En esta encuesta a 179 personas consumidoras tanto de índica como de sativa, se les pregunta acerca de cómo les sienta los distintos tipos de cannabis. Traduciendo un párrafo del estudio:
"Los participantes informaron una mayor preferencia por usar índica en la noche y sativa en la mañana y la tarde. Los participantes eran más propensos a percibir sentirse "somnolientos/cansados" o "relajados" después de usar índica y "alertas", "energizados" y "motivados" después de usar sativa. Los encuestados eran más propensos a manifestar querer usar índica si iban a dormir pronto, pero más propensos a usar sativa en una fiesta."
También concluye, analizando los patrones de compra, que la demanda de estos dos tipos es similar.
En esta otra encuesta de 2013, se pregunta a 95 consumidores de cannabis sativa y cannabis indica acerca de sus motivos de elección de una variedad u otra. Se afirma que la preferencia por la indica es significativa en personas que buscan alivio de algún dolor, sedación o ayuda para dormir. Por otra parte, el consumo de sativa se asocia con buscar estados eufóricos o activos. Por último, mientras que el consumo de indica se asocia a padecimientos como dolor de cabeza, glaucoma o epilepsia, el consumo de sativa no se asocia con ningún padecimiento en particular. Ya hemos hablado en otras ocasiones de como el consumo de CBD u otros cannabinoides puede ayudarte en casos como dolores de cabeza, fibromialgia o inflamaciones en general.
Podemos concluir entonces que hay como mínimo una tendencia a avalar al menos los efectos que se adjudican a cada uno de los tipos de cannabis por parte de los consumidores.
Lo que la ciencia dice
Como puedes imaginar, lo que la ciencia dice es una cuestión compleja. Es una buena forma de abordarlo empezar con este capítulo del libro “Cannabis sativa L. – Botany and Biotechnology” de 2017. En él se hace un repaso extenso de la taxonomía del Cannabis indica y Cannabis sativa desde su primera definición hasta llegar a la última hipótesis disponible que explicábamos en este otro artículo.
Esta definición taxonómica se ha contrapuesto con lo que tradicionalmente se ha llamado indica y sativa, admitiendo que no siempre han sido lo mismo. Son interesantes las propuestas de definir lo que es indica y sativa mediante su quimiotipo, es decir análisis de las sustancias y sus proporciones presentes en una planta. También es interesante saber que, aunque la cantidad de sustancia que sintetiza una planta depende casi exclusivamente de factores ambientales, la variedad de sustancias y su proporción depende de factores genéticos y es fundamental a la hora de evaluar sus efectos cuando se consume.
En resumidas cuentas, y volviendo un poco al tema del artículo, aunque se habla de que hay una variante originaria de la india (Cannabis sativa) y otra variante de origen afgano (Cannabis indica) con quimiotipos diferentes, la expansión de la planta y su cultivo ha dado lugar a muchísimas hibridaciones que hacen que sea casi irrastreables aquellas variedades originales.
Junto con la mezcla de Cannabis ruderalis, que también tiene propiedades de crecimiento y floración muy interesantes, podemos encontrar híbridos con aspectos muy variados que tengan quimiotipos correspondientes a lo que entendemos por índica o sativa.
Podemos hacernos una idea más clara de qué concluir de todo esto echando un vistazo a esta entrevista realizada al Dr. Ethan Russo. Aquí puedes encontrar información en español sobre quien es. Mira por ejemplo que responde acerca de la cuestión de si hay dos especies distintas de Cannabis, la sativa y la índica (la cita está traducida):
“¡Los taxonomistas botánicos nunca están de acuerdo en nada por mucho tiempo! Para parafrasear y expropiar una vieja expresión en yiddish: 12 taxonomistas botánicos, 25 opiniones diferentes. (...) Está claro que existen muchos quimiotipos de Cannabis: predominante en THC, predominante en CBD y tipos mixtos. Esta es una buena clasificación básica, pero también ha sido posible criar selectivamente otros quimiotipos que expresan altos niveles de THCV, cannabidivarina (CBDV), cannabicromeno (CBC) e incluso algunos que producen el 100% de sus cannabinoides como cannabigerol (CBG), u otros sin cannabinoides en absoluto. El debate continúa.”
Así, a falta de consenso y de claridad por parte de taxónomos y botánicos, concluye lo siguiente cuando se le pregunta acerca de que debemos de hacer con la dicotomía indica/sativa:
“Dado que los taxonomistas no pueden ponerse de acuerdo, animaría encarecidamente a la comunidad científica, a la prensa y al público a abandonar la nomenclatura sativa/indica y, en su lugar, insistir en que se disponga de análisis bioquímicos precisos de los perfiles de cannabinoides y terpenos para el Cannabis tanto en los mercados médicos como recreativos. La precisión científica y la salud pública exigen nada menos que esto.”
Índica vs Sátiva: conclusiones y consejos
Podemos entonces resumir a grosso modo que solamente con el aspecto de la planta no se puede concluir con certeza qué cantidad y proporción de sustancias tiene, y por tanto no podemos saber cómo va a afectarnos. Aunque decidamos hablar de indica y sativa en función de su aspecto, o en función de su quimiotipo, la única forma de estar seguros es mediante un consumo bien informado.
También es importante tener claro que, en función de estas proporciones, la planta puede servir para unos fines u otros. Por ejemplo, la variedad de AK-47 suele denominarse de genética “sativa dominante” y sin embargo encontramos flores de esa variedad sin THC, con un quimiotipo que solo contiene CBD y otros cannabinoides.
Podemos explicar entonces el convencimiento del público en general de la existencia de estos dos tipos y su contraste con la opinión científica. En el mercado seguramente la marihuana (con THC) etiquetada como sativa tenga un quimiotipo compatible con la idea general, independientemente de la forma externa de la planta o de los cogollos. Por otra parte, la existencia, como ya se ha comentado, de plantas que producen cogollos o flores sin THC ni sustancias psicoactivas pero con apariencia y propiedades organolépticas que asociamos a indica o sativa, demuestran que lo importante es la composición del producto que tengamos.
Por último, en relación a qué consumir en función de lo que buscas, recomiendo informarte siempre en la medida de lo posible. Un análisis de laboratorio te dirá qué sustancias tiene y en qué proporción. Unas flores con mayor cantidad de THC puede servir para fines lúdicos, mientras que más presencia de CBD, CBG u otros cannabinoides la pueden hacer ideal para conciliar el sueño, relajarte o tratar de aliviar algún dolor.
Espero que hayas disfrutado el post y que te haya servido de ayuda. Si tienes alguna duda o comentario, ¡no dudes en dejarlo aquí abajo!
