En este post nos vamos a meter de lleno en el uso del CBD para los síntomas de la fibromialgia. Para ello primero se caracterizará la enfermedad, se comentará el posible uso que se puede hacer de esta sustancia y por último se valorará la evidencia científica disponible hasta el momento sobre el tema.
Índice
¿Qué es la fibromialgia?
La fibromialgia es una enfermedad crónica relacionada con una alteración del sistema nervioso en lo que a la percepción de dolor se refiere. Se conoce que debe de haber una predisposición genética y otros factores ambientales, pero no se tienen muy aislados los condicionantes para desarrollarla. Los síntomas son dolor crónico en el aparato locomotor junto con otros síntomas como alteración de la higiene del sueño, debilidad, depresión, ansiedad etc. Como toda enfermedad crónica, desde que se comienza a desarrollar se van sucediendo distintas etapas en las que la sintomatología puede cambiar, haciéndose esta más o menos asumible.
Siendo la fibromialgia una enfermedad no curable, con un tratamiento muy variable y complicado y que puede llegar a ser bastante incapacitante, podemos preguntarnos acerca del diagnóstico y las opciones que tenemos.
¿Tengo fibromialgia? Diagnóstico y enfermedad
Es importante tener en cuenta que la fibromialgia per se ha sido reconocida como enfermedad por la OMS hace relativamente poco, en 1992. Es una enfermedad que parte de la comunidad médica consideraba tan solo un trastorno de somatización (es decir, dolor o malestar manifestado sin origen físico u orgánico). Esto ha sido desmentido en los últimos años, pero dadas las características de la enfermedad, era muy difícil demostrar en un diagnóstico que se padecía fibromialgia, con las consecuentes complicaciones que esto conlleva (se comienza los tratamientos más tarde, sin un diagnóstico no se puede cursar una baja laboral etc.).
Estas cuestiones, como te puedes imaginar, han complicado mucho la elaboración de los criterios a seguir a la hora de diagnosticar los pacientes. Para que te hagas una idea, los primeros criterios de la Sociedad Americana de Reumatología en 1990 tenían solo en cuenta los puntos dolorosos que padecía el o la paciente.
En la actualidad, aunque siga siendo una enfermedad infradiagnosticada (además, ten en cuenta que los cambios en los criterios de diagnosis tardan tiempo en tener efecto en la sociedad), recibe mucha más atención por parte de la sociedad y de la comunidad médica, y es mucho más asequible ser diagnosticado en un tiempo razonable. Aunque los pacientes siguen sufriendo cierta estigmatización, se va reconociendo la importancia de la fibromialgia, que se calcula ya que afecta al 2 o 3% de la población, sobre todo mujeres de mediana edad, y conforma hasta el 12% de consultas a reumatología.
¿Qué quiero entonces decir con todos estos datos y recorrido de la diagnosis de la fibromialgia? Pues quiero recalcar la importancia de acudir a tu médico si tienes síntomas compatibles y, en caso de padecerla, conseguir un diagnóstico temprano. La primera razón es por tu propio bienestar (los tratamientos, de los que hablo a continuación, cuanto antes se aborden mejor). La segunda es contribuir a acumular evidencia acerca de esta enfermedad y visibilizar una realidad que es cotidiana a muchas personas.
Me gustaría por último resaltar el papel que pueden jugar las asociaciones de pacientes que prestan redes de apoyo y que pueden ayudarte a sobrellevar las
dificultades de esta enfermedad. Es una buena forma de crear comunidad, visibilizar esta enfermedad y compartir nuestra experiencia, así como de ofrecer y recibir apoyo en caso de necesitarlo. Además se puede usar como palanca de cambio para visibilizar esta enfermedad o para presionar a las instituciones en los casos en los que los medios disponibles son insuficientes.
Tratamientos de la fibromialgia
Hemos comentado que la diagnosis de esta enfermedad es, de unos años a esta parte, más asequible que en el pasado. Una vez contamos con nuestro diagnóstico, podemos preguntarnos ¿ahora qué? Se ha mencionado ya que es una enfermedad sin cura, al menos hasta el momento. Pero eso no quiere decir que no haya una serie de medidas y sustancias que puedan ayudarnos a sobrellevarla. Los tratamientos convencionales que más se mencionan pueden dividirse en dos grandes grupos.
- El primero, que además es importante abordarlo cuanto antes, son una serie de medidas y hábitos que se han demostrado eficaces para paliar algunos de los síntomas. Estos pasan por unas prácticas de higiene y dieta adecuadas, la realización de algún deporte aeróbico o recibir algún tipo de terapia psicológica (la evidencia resalta el papel de la terapia cognitivo-conductual en la mejoría de los y las pacientes).
- El segundo gran grupo consiste en el tratamiento farmacológico. Hay una amplísima variedad de fármacos que han demostrado tener cierta eficacia contra algunos síntomas, como pueden ser algunos analgésicos, antidepresivos o anti convulsionantes. Hay que tener en cuenta lo siguiente: no hay una mezcla de estos perfecta como tratamiento, sino que se suele buscar una mezcla de los mismos que siente bien a cada paciente, y ninguno de estos es un tratamiento completo a los síntomas de la enfermedad. Además, hay que lidiar con los efectos secundarios que cada una de estas sustancias tiene. Para encontrar un conjunto de fármacos adecuado es muy importante también el diagnóstico temprano, así como consultar y confiar siempre en tu médico o médica.
En vista de este panorama respecto a tratamientos farmacológicos es normal que se haya estado buscando otras alternativas. Es aquí donde entra en juego el otro protagonista de este post: el CBD.
CBD y fibromialgia
El consumo de distintos cannabinoides como tratamiento para la fibromialgia es una posibilidad que, aunque aún falta evidencia definitiva, es muy prometedora. Hay estudios y encuestas, mencionados en el apartado de evidencia, que ofrecen resultados favorables, si bien siguen criterios distintos entre ellos y es complicado sacar una conclusión firme y unánime de todos ellos. Pero vamos a comenzar a hablar de esto desde el principio: ¿por qué puede ayudarme el CBD si tengo fibromialgia?
Fibromialgia y el sistema endocannabinoide
El sistema endocannabinoide es un sistema complejo de receptores que regula algunos procesos como el dolor o el apetito (entre otros muchos). Este sistema se ve alterado con el desarrollo de la fibromialgia y, a su vez, es el sistema donde actúan las sustancias que conocemos como cannabinoides. Algunos de estos cannabinoides los sintetizamos en nuestro propio cuerpo y otros existen en la naturaleza. Por ejemplo, el CBD es un cannabinoide (como el CBG, CBN o THC) y se puede encontrar en las plantas de cáñamo.
Estos cannabinoides tienen propiedades distintas, muchas de ellas beneficiosas y muy prometedoras. El CBD, así como el CBG y CBN, tiene propiedades antinflamatorias, puede ayudar a conciliar mejor el sueño, a sobrellevar la ansiedad y tiene efecto analgésico con el que se consigue reducir el dolor. Aunque estas son solo algunas de sus propiedades, quizás son las más relevantes a la hora de atacar los síntomas de la fibromialgia.
También es importante recordar que, al contrario que el THC, no tiene un efecto psicoactivo. Si quieres saber más, aquí tienes una entrada sobre el CBG y aquí tienes algunas preguntas frecuentes sobre el CBD.
La forma en que el CBD (u otros cannabinoides) te puede ayudar no es solo por estos efectos generalistas. Claramente favorecen al bienestar del paciente, y sucede así, por ejemplo, en el caso de las migrañas del que ya hablamos aquí.
El hecho de que el CBD interaccione con el sistema precisamente afectado por la enfermedad, el endocannabinoide, abre una puerta a este tipo de sustancias como tratamiento específico para esta enfermedad. Si quieres saber más acerca de la evidencia disponible, ¡sigue leyendo!
¿Qué dice la ciencia sobre el uso del CBD para paliar los síntomas de la fibromialgia?
Al igual que sucedía en el caso de la migraña, aunque existen serios indicios de que puede ser prometedor como tratamiento, falta aún evidencia debido a la legislación tan variada entre países de este tipo de sustancias (ya sean productos con cannabis psicoactivos o no). Esto a su vez dificulta hacer estudios clínicos extendidos y con una correcta metodología. Si los estudios no están homogeneizados y no cuentan con el efecto placebo, no se pueden hacer meta-estudios fiables sobre estos trabajos y, por lo tanto, no se puede afirmar con rotundidad que estas sustancias sirvan como tratamiento.
Aun con este panorama, el número de estudios y publicaciones acerca de esto se han multiplicado en los últimos años. Para un acercamiento al estado de la cuestión puedes comenzar consultado este artículo1 de la RESED (Revista de la Sociedad Española del Dolor). Es de 2022 y repasa la evidencia de que se dispone hasta ahora. Hace un resumen también de la evolución de la enfermedad y de los diagnósticos de esta.
Sin meternos aún en publicaciones más áridas al respecto, también recomiendo encarecidamente visitar el sitio web de la Fundación CANNA, que es una asociación sin ánimo de lucro vinculada a una empresa de fertilizantes que hace una labor de análisis, estudio y divulgación sobre el uso terapéutico de este tipo de sustancias. Aquí tienes, por ejemplo, una entrada que trata específicamente sobre fibromialgia y uso de cannabinoides.
Pasando un poco a literatura científica al respecto, te dejo por si es de tu interés esta revisión2 de 2021. En ella se revisan centenares de artículos publicados, de los cuales se van descartando debido a metodologías no suficientemente rigurosas, heterogéneas u otros motivos, y acaba realizando un estudio de 22 artículos al respecto. Las conclusiones van muy en línea con lo expuesto: muestra potencial terapéutico contra muchos síntomas negativos de la fibromialgia y ayuda a reducir el consumo de opioides como tratamiento, aunque aún falta investigación para poder afirmarlo con rotundidad.
Aquí3 tienes también una encuesta realizada en 2021 a 3455 participantes con similares conclusiones. La inmensa mayoría reporta mejorías en una gama razonablemente amplia de síntomas. Te dejo también otra revisión4 de 2023 con resultados similares. Cabe destacar que la mayoría de trabajos que tratan estas revisiones es con una mezcla de cannabinoides que incluyen THC.
Para terminar este apartado, voy a dar la la última referencia5 de 2019. Esta es contraria al resto de conclusiones. De esta forma, creo que se puede considerar todas las opiniones sobre el uso del CBD para la fibromialgia (u otros cannabinoides). Afirman no encontrar diferencia estadística entre la mejoría del grupo que consume cannabis placebo (sin THC ni CBD pero con el resto de terpenos) y también comentan algunos efectos secundarios del consumo de cannabis como tratamiento. Quiero señalar, a mi juicio, dos limitaciones de estas conclusiones. La primera es que el CBD y el THC no son los únicos cannabinoides presentes en la planta con propiedades útiles para los síntomas que estamos tratando. Desconfío de la utilidad de este placebo, ya que no es inocuo. En segundo lugar, buena parte de los efectos secundarios que refieren se limitan o bien a los efectos psicoactivos del THC o bien a los efectos de la inhalación de la flor de cannabis. Hay otras vías que no tienen estos inconvenientes, como puede ser el aceite de CBD.
¿Cómo y cuanto CBD debo utilizar para que sea efectivo contra la fibromialgia?
Antes de ahondar en como puedes consumir el CBD, así como otros cannabinoides, quiero señalar la importancia de consultar previamente a tu médico sobre cualquier decisión que consideres tomar. El CBD y otros cannabinoides, aunque son sustancias seguras, sin riesgos de sobredosis (no se conocen casos) y sin grandes efectos secundarios, pueden interaccionar con determinados medicamentos. Aquí puedes encontrar una lista de medicamentos que pueden interaccionar con el CBD.
Vamos a abordar el como consumir CBD para tratar los síntomas de la fibromialgia. Hay numerosas formas de consumir esta sustancia sea cual sea el motivo. Podemos optar por la vía inhalada (ya sea fumando o vaporizando las flores o el hash), mediante la ingesta o vía tópica mediante algún gel o crema.
La vía tópica puede ser muy útil en lesiones o molestias musculares o inflamaciones. No solo cuenta con los beneficios del propio masaje de la aplicación, sino que, además, en casos de inflamaciones y dolores musculares no relacionados con la fibromialgia se ha estudiado su eficacia. Aquí tienes por ejemplo un post de una web de contenidos sobre medicina (hay muchos otros ejemplos) que trata el tema.
La vía inhalada puede ser una buena opción. De hecho, en la
mayoría de los estudios realizados la vía de consumo es esta. Además, juega a su favor el hecho de que el tiempo que tarda en hacer efecto es más rápido que en el caso de la ingesta. Sin embargo, tiene el inconveniente de los efectos nocivos de la inhalación de humos y sustancias mediante combustión.
Nos queda pues la vía ingerida. Puedes considerar la posibilidad de infusionar flores o hash. Aunque tarde más que la vía inhalada en hacer efecto no cuenta con ninguno de sus inconvenientes.
Una muy buena opción es mediante gotas de aceite de CBD. El tiempo de acción es muy corto y la dosificación es más precisa que mediante otros métodos.
Y, hablando de dosis, vamos a tratar el cuanto hay que consumir. En los estudios consultados se trata sobre todo dosis inhaladas u orales y varía mucho el tipo de cannabinoides usados e incluso se combinan. Además, la dosis puede ser distinta si se es ya consumidor o si es la primera vez que se accede a este tipo de sustancias. Aquí te dejo unas tablas con la información de cuantas gotas hay que consumir en función de la intensidad del dolor y del peso. Se recomienda siempre seguir un principio de prudencia y consultar siempre a tu médico, especialmente si sigues algún tratamiento.
Vale pero, ¿Cual es el aceite CBD adecuado para mí?
Desde nuestra experiencia, los aceites que mejor funcionan para aquellas clientes que padecen esta enfermedad son los aceites con una concentración alta y, preferiblemente, que también sea de espectro completo y que tenga una concentración alta en otros cannabinoides para conseguir el efecto séquito.
Este efecto séquito se consigue cuando se consumen varios cannabinoides juntos, lo que se produce es una combinación y potenciación de los beneficios de cada uno de los cannabinoides.
En nuestro caso, hay un aceite que destaca por encima del resto en cuanto a resultados se refiere. Este aceite no solo contiene un 30% de CBD, sino que también contiene un 7,5% de CBG, un cannabinoide que tiene también grandes propiedades que son de gran utilidad para aliviar algunos síntomas de la fibromialgia. Algunas de estas propiedades van desde un efecto antibacteriano, hasta un efecto antidepresivo, una mejora de las enfermedades intestinales o una ayuda a la hora de conciliar el sueño.
Si tenemos en cuenta todas estas propiedades, la alta concentración de estos dos cannabinoides y el efecto séquito del que acabamos de hablar, damos con un aceite potente que puede ser de gran ayuda para las personas que padecen esta enfermedad.
Referencias
- Astráin-Aguado, MÁ, García-Recio, E, de Santiago-Moraga, J, & Sánchez-Nicolás, M. (2022). ¿Es útil el cannabis medicinal para el tratamiento de la fibromialgia?. Revista de la Sociedad Española del Dolor , 29 (Supl. 1), 27-31. Publicación electrónica del 28 de noviembre de 2022. https://dx.doi.org/10.20986/resed.2022.4029/2022
- Khurshid, H., Qureshi, I. A., Jahan, N., Went, T. R., Sultan, W., Sapkota, A., & Alfonso, M. (2021). A Systematic Review of Fibromyalgia and Recent Advancements in Treatment: Is Medicinal Cannabis a New Hope?. Cureus, 13(8), e17332. https://doi.org/10.7759/cureus.17332
- Boehnke, K. F., Gagnier, J. J., Matallana, L., & Williams, D. A. (2021). Cannabidiol Use for Fibromyalgia: Prevalence of Use and Perceptions of Effectiveness in a Large Online Survey. The journal of pain, 22(5), 556–566. https://doi.org/10.1016/j.jpain.2020.12.001
- Strand, N. H., Maloney, J., Kraus, M., Wie, C., Turkiewicz, M., Gomez, D. A., Adeleye, O., & Harbell, M. W. (2023). Cannabis for the Treatment of Fibromyalgia: A Systematic Review. Biomedicines, 11(6), 1621. https://doi.org/10.3390/biomedicines11061621
- van de Donk, T., Niesters, M., Kowal, M. A., Olofsen, E., Dahan, A., & van Velzen, M. (2019). An experimental randomized study on the analgesic effects of pharmaceutical-grade cannabis in chronic pain patients with fibromyalgia. Pain, 160(4), 860–869. https://doi.org/10.1097/j.pain.0000000000001464